Jorge Molina de Unter y el Ministro Marcelo Mango (foto Canal 10) |
El Consejo
Directivo Central de la Un.T.E.R. pone
en conocimiento de todas/os las/os trabajadoras y trabajadores de la educación su
opinión acerca de lo discutido en la última paritaria, con el propósito de que
todas las compañeras y compañeros
docentes y la comunidad en general,
conozcan claramente qué sostenemos, por qué y desde dónde lo hacemos. Siempre
fue y seguirá siendo parte de nuestra política hacer lo que decimos y decir lo
que pensamos, con claridad y sinceridad. Las/os trabajadoras/es deben tener
siempre todos l
os elementos necesarios que permitan arribar a definiciones que
representen los intereses del conjunto.
Hoy la situación es compleja, venimos del vaciamiento
del estado provincial y de la escuela
pública y escuchamos cómo los personajes del pasado que fueron repudiados por
el voto popular, los que aplicaron el ajuste neoliberal, los que malversaron y
degradaron el Estado y la sociedad, los que se enriquecieron sin trabajar,
pretenden transformarse en defensores de los derechos de las/os trabajadoras/es.
Nosotras/os no nos confundimos. La defensa de los intereses de las/os
trabajadoras/es requiere claridad en cada postura política. Por eso somos
clarísimos en lo que respecta a las políticas de Estado: estamos en público desacuerdo
con algunas medidas del actual gobierno (derogación de la ley de prohibición de
minería con uso de Cianuro, ley de
disponibilidad) y acordamos con otras (como la reforma en la ley de educación);
y como siempre qué hacer, cómo hacerlo, en qué momento y con quién, es decisión de las trabajadoras y los
trabajadores.
Como Comisión
Directiva Central y en función de los intereses de las/os trabajadoras/es de la
educación, decimos con toda claridad que creemos necesario y conveniente
aprobar la propuesta trabajada en la paritaria porque consolida el rumbo que
venimos sosteniendo sin renunciar a ninguna bandera. Ya que mejora el poder
adquisitivo real del salario de cada compañera/o al mismo tiempo que aumenta el
Salario Básico por encima del aumento del Salario de Bolsillo.
Consideramos que
esta pauta salarial mejora
sensiblemente el salario, ya que:
·
garantiza elevar el básico por nomenclador pasando de $709,70
(actual) a $851,72 en marzo, $898,66 en julio y 934,66(como mínimo) en octubre
dando un aumento acumulado del 31,69 % del básico nomenclado.
·
el salario básico conformado pasa del valor de $1129,70 (actual) a $1342,12 en Marzo, $1411 en julio y
1468,71 (como mínimo) en octubre, dando
un aumento acumulado del 30 % en este
concepto.
·
Se aumentan 80 puntos de nomenclador a octubre, en los cargos
de Maestro de Grado y preceptor en función de seguir mejorando los cargos más
postergados.
·
Garantiza un aumento bolsillo mínimo para el cargo testigo de
$505 en marzo y $ 555 en julio y 605 en octubre.
·
Deja la negociación abierta para el segundo semestre en
función de seguir mejorando el básico conformado, el salario de bolsillo y el
aumento de los puntos a los cargos más postergados.
·
Nos acerca al salario
básico promedio de la Patagonia y al salario de bolsillo promedio de la región.
De aprobarse esta
propuesta lograríamos como sindicato en un año y medio:
107,15% de aumento
al básico conformado. ($709 a $1468,71)
77% de aumento de
bolsillo del cargo testigo. ($2005 a $3550)
Y con la
posibilidad cierta de mejorar aún más el salario básico y de bolsillo en el
segundo semestre de este mismo año.
Además el sindicato sale más fortalecido y autónomo
que nunca; porque esta propuesta no se agota en lo salarial y nos permite:
incorporar más compañeras/os a la estabilidad laboral( decreto 134), actualiza y permite analizar la modificación
de la movilidad docente, abre el debate
de una nueva Ley Orgánica de Educación para consagrar más derechos y más
democracia concibiendo a la educación como un derecho social cuyo único garante
es el Estado, incorporar mas compañeras/os a los planes de viviendas acordados
en paritaria docente nacional, avanzar en la designación de personal docente en
los jardines maternales comunitarios, equiparar los valores de las asignaciones
familiares con los pagados a nivel nacional, re-discutir la organización y estructura de
todos los niveles y modalidades,
incorporar nuevos puestos de trabajo, etc.
Por todo lo expresado las/los convocamos a aprobar lo
discutido en la paritaria, asistiendo a las asambleas de cada una de las
seccionales, porque en esta coyuntura histórica tenemos el desafío
y la responsabilidad de transformar “la bronca en esperanza”.
Esperanza que bajo ningún punto de vista
significa sentarse a esperar, sino pelear por nuestros derechos, con astucia e inteligencia, para seguir
siendo un sindicato que apoya las políticas que benefician a las/os
trabajadoras/es y lucha contra aquellas que atentan contra sus intereses.
Jorge Molina
Secretario General UnTER